La Liga de la Ciencia Pagana es un proyecto puesto en marcha por Pizarro (trasunto electrónico del compositor extremeño Rades) y el bajista, ex A Palo Seco, Leandro Alonso.

Y se trata sin duda de un proyecto de militancia. De militancia combativa frente a los fundamentalismos, las mojigaterías, la arrogancia y la intransigencia.



Recoge en su fondo de armario postulados y estéticas que vienen del punk más nihilista, del universo libertario, de la poesía simbolista, los heterodoxos y las misiones pedagógicas, las pinturas rupestres y Microsoft, el Corto Maltés y Patti Smith.

Al tiempo la Liga de la Ciencia Pagana navega entre la performance, el arte de acción, las intervenciones y las guitarras afiladas, con propuestas de pequeño formato y breve, pero intenso metraje.

Con un minutaje que no excede en general los 20-25 minutos, las propuestas de la Liga de la Ciencia Pagana pretenden ser disparos, puñetazos en el bajo vientre, latigazos a la conciencia, y para ello la Liga no duda en hacer uso de la alta tecnología, el software y los mandos a distancia.



Desde su nacimiento en 2005, la Liga de la Ciencia Pagana ha tenido la ocasión de mostrar sus dientes en algunos de los festivales más relevantes de Extremadura como el Festival de Mérida (2006 y 2007), el Festival de Teatro y Danza Contemporáneos de Badajoz (2006), el Festival Maquinarte (2006), o el Festival de Teatro en la Calle de Villanueva (2007), así como eventos que han trascendido los ecos nacionales, como su presentación en las fuentes del Palacio Real de Madrid con motivo de La Noche en Blanco (2006).